sábado, 26 de junio de 2010

El debut ante Sudáfrica, una pena


A Balón Parado
Las vuvuzelas, que dicen los entendidos semejan barritos de elefante y zumbidos de abejas juntos, no le hicieron daño a la selección mexicana... pero no era necesario. México, que inició jugando con claridad, con orden e intensidad, terminó siendo presa de sus fantasmas y eso es peor que cualquier presión externa.
Lo que se vio en el Soccer City es una película ya conocida por los mexicanos, lo único que cambió fue el antagonista.
De nuevo el Tri jugó de la única manera que sabe hacerlo, quitándole el balón al contrario, y de nuevo le enseñó al mundo que frente a la portería se le acaban las ideas y se le achica el marco.
Otra vez el resultado no correspondió con las expectativas.
Antes del juego muchos pensamos en un triunfo nacional, así son las ilusiones de veleidosas. Después del partido lo que florecen son las dudas.
Tanto para uruguayos, franceses y mexicanos, la clave en teoría para calificar a octavos era ganarle a Sudáfrica y rescatar algún empate. México empató con quien no debía, ahora está obligado a ganarle a Francia o a Uruguay.
¿Es Sudáfrica al equipo más debil del grupo de México? La respuesta es sí y nos pone a temblar.
Los africanos tienen algunas virtudes jugando y varios defectos. Así como desdoblan rápido y disparan con facilidad al arco, son desordenados para marcar y a balón parado se dejan ganar la posición facilmente.
Ni Franco, ni Vela, ni Giovani, supieron aprovechar estas fallas y el resultado fue este amargo empate, que casi se vuelve derrota.
Aun así sigo pensando que México es mejor que Sudáfrica hombre por hombre, y aunque pudiera parecer lo contrario, el empate de ayer me deja una enseñanza que puede alimentar la ilusión de un buen resultado.
Un equipo con limitaciones, pero que sepa desarrollar sus virtudes se puede imponer a otro mejor.
Eso hizo Sudáfrica, eso espero que haga México contra los franceses que aunque hombre por hombre son mejores, ya sabemos que no garantiza nada.
De Uruguay hablamos luego.

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